Una misma realidad puede ser vista de diferentes maneras. Lo que para unos puede ser agradable y divertido para otros no. La realidad es la misma pero la forma de mirarla y por lo tanto de verla puede cambiar. En realidad esto sucede con todas las cosas de nuestra vida. Las cosas son como son pero nuestra forma de verlas, interpretarlas y sentirlas, puede cambiar.
Epiceto decía que “El problema no está en las cosas sino en la opinión que tenemos de las cosas”, es decir, el problema y las diferencias están en nuestra forma de mirar las cosas.
Darnos cuenta de que nuestra felicidad y, en suma, nuestra capacidad de gozar, dependen mucho más de nuestra forma de ver las cosas y de la opinión que tenemos de ellas, que de las cosas en sí; es algo muy importante para ese primer paso en el camino del tantra, que nos pide responsabilizarnos de nuestra propia felicidad, mediante un uso eficaz de la energía.
La Conciencia Amorosa
Gran parte del entrenamiento tántrico consiste precisamente en adoptar esa conciencia amorosa, esa mirada del amor que te hace captar tu propia belleza y también la belleza de la Vida.
Así generas una actitud interior positiva y gozosa que te hace más feliz y permite que aportes cosas positivas a la vida y los demás.
Esa conciencia amorosa, esa mirada que se hace desde el amor, necesita un alimento para ser mantenida de una forma permanente y lo mejor es aprender a mirar para poder captar la belleza de la Vida, orientando tu mirada hacia la captación de la belleza.
Cuando nos sentimos bien tendemos a ver las cosas más positivamente, cierto, pero también podemos ir al revés, si aprendemos a ver las cosas positivamente, nos sentiremos bien.
Navidades Mágicas. El Nacimiento de la Luz.
Lo que se celebra en las Navidades es el nacimiento de la luz que, en medio de la noche y del invierno, viene a traerte la promesa y la esperanza, de que todo puede ser mejor porque la luz irá creciendo en el mundo y en ti.
Estas son unas fechas muy especiales porque son un tiempo ideal para la renovación y vivir con más plenitud el amor, las relaciones, tu sexualidad y la vida en general.
La luz quiere nacer en ti y en el mundo, quiere crecer en ti, invitándote a que vivas con más belleza y más gozo. Es necesario que vivas con más gozo para poder aportar gozo y belleza al mundo, ya que si estás amargado no podrás aportar nada positivo.
Mantenerte de una forma permanente en ese ánimo positivo es lo realmente difícil y para ello debes ejercitarte en esa búsqueda de la belleza de la Vida que llene de luz y amor la copa de tu corazón, para después poder ofrecerla al mundo.
Realmente este es el entrenamiento tántrico: ejercitar los “músculos del amor” en una permanente búsqueda de la belleza que desarrolle y amplifique tu conciencia amorosa. Deseando siempre encontrar esa belleza que también hay dentro de ti para poder ofrecerla a los demás, para poder ofrecerla a la Vida.
Como he dicho antes, todas estás fiestas son días especiales llenos de energía cósmica que invita a renovarse para que la Luz pueda crecer en ti. Puedes mirar las navidades como quieras pero siempre es un tiempo que da más oportunidades para poder ejercitarse en ese contemplar la belleza de la Vida a la que te invita el Tantra.
Tiempo de Renovación. El Poder del Deseo
También, con el final del año y el comienzo del otro, es un tiempo mágico de renovación que invita a dejar atrás todo lo que limita tu felicidad. Un tiempo para invocar nuevos propósitos, nuevos deseos que sirvan de estímulo y aliciente para el Nuevo Año.
Desear algo hermoso, tener un sueño es algo que nos mantiene despiertos, que nos empuja a vivir cada día con ilusiones, es algo importante para la Vida.
si quieres saber mas, “Amarte: creando la plenitud” pincha en la foto