Nos empeñamos en ser amados y encontrar el amor fuera, pero cuanto más lo buscamos fuera menos lo sentimos dentro. Así nos perdemos.
Si estamos pendientes de los demás no estamos con nosotros.
Ese es el problema.
El amor es una energía que sale de nuestro interior y va hacia fuera, hacia quien amamos.
¿Por qué no dirigirla hacia ti? ¿No es eso amarte?
Hay una regla sencilla para empezar: Todo lo que esperas que te dé la otra persona, debes dártelo tu.
Así se empieza. Dándote lo que pides al otro.
– Compañía,
– Complicidad,
– Lealtad,
– Compromiso
– Solidaridad,
– Escucha,
– y Gozo.

Complacerte, cuidar tu cuerpo y cuidarte tú. Para todo eso hace falta algo muy importante: Tiempo
¿No deseas que quien te ame te dedique tiempo?
Lo mismo debes hacer tú contigo.
Dedicarte tiempo a tí, a lo que te gusta, a darte aquello que te hace sentir bien.
Siendo todo esto tan básico como necesario, los pasos en el camino del Amarte son:
1.- La presencia. Vivir con conciencia.
Amarte implica estar contigo y presente en tu vida, para acompañarte y conocerte.
Saber quien eres, qué quieres, que no quieres, por qué haces las cosas.
Así podrás tomar mejores decisiones, más felices y vitales.
La meditación vital, meditar regularmente, desarrolla tu presencia,
Estar más en tu vida y lo que haces.
2.- Vivir con corazón. Sentirte y saber gestionar tus emociones.
Amarte es una gimnasia emocional que implica estar presente en tus emociones.
¿Qué sientes? ¿Por qué lo sientes?
Expresar tu desagrado en su momento
y tu alegría cuando la sientes.
Decir sí cuando de verdad quieres
y no cuando tu corazón lo siente.
2.- Vivir con corazón. Sentirte y saber gestionar tus emociones.
Amarte es una gimnasia emocional que implica estar presente en tus emociones.
¿Qué sientes? ¿Por qué lo sientes?
Expresar tu desagrado en su momento
y tu alegría cuando la sientes.
Decir sí cuando de verdad quieres
y no cuando tu corazón lo siente.
3.- Comprometerte contigo. Hacer contigo un compromiso de amor.
Antes de comprometerte con nadie, debes comprometerte contigo.
Tener claro que quieres y que no, para ti y con los demás
El compromiso de acompañarte siempre y desearte lo mejor.
4.- Cuidar tu cuerpo, dedicarte tiempo, pedir y darte lo que necesitas.
Amarte es entrenarte en atreverte a ir a por lo que quieres, sintiendo que lo mereces.
5.- Convivir con tus heridas, descubrir tu boicoteador interno para que no te afecte.
Amarte no significa no tener miedo, heridas que a veces duelen o voces interiores que no te valoran.
Hay que saber convivir con eso, aceptar a nuestro niño herido y cultivar nuestra grandeza
Hay más cosas que debes hacer pero así comienza el camino de tu amor por ti,
Que te traerá con más seguridad el de otra persona.
6.- Buscar la belleza, tu belleza y la de la Vida.
Descubre las cosas bonitas que tienes y que haces:
El lado hermoso de la vida y de tu vida.
Tu corazón y tu amor se alimentan de belleza, búscala en ti y en todo.

No tengas duda, si sufres y tienes problemas en tus relaciones es porque no te amas lo suficiente. Es necesario aprender a amarte para poder amar sin dependencias, conflictos y posesividad.
Cuando aprendas a estar contigo, acompañarte, comprenderte, aceptarte y desearte lo mejor, entonces podrás decir que te amas y, cuando te ames, podrás darte el inmenso gozo de amar.

