3.- Saber aplicar la energía. Centrándote en tus verdaderos objetivos y deseos. ¿Qué haces? ¿A dónde vas? ¿Qué quieres conseguir? ¿Qué estás alimentando?
Si tienes energía, es para hacer algo con ella, llevarla a algún sitio, sueño, meta o proyecto. Puede ser material o totalmente espiritual, como ofrecer amor, o un servicio a la humanidad; pero en cualquier caso, necesitas primero tenerla, después no perderla y al final, saber llevarla hacia lo que realmente quieres.
Es como el agua que va por la cañería, si además de no tener pérdidas, es eficientemente conducida, tendrá más efecto. Tener las cosas claras, sin contradicciones, reservas o bloqueos, es lo importante.
Lo que moverá tu energía, serán los deseos en los que te impliques, de ahí la importancia de ser consciente de tus deseos, saber gestionarlos, y priorizar los realmente importantes, sabiendo centrarte en ellos.
Debes ser consciente de cómo manejas la energía del deseo, porque aquellos en los que te implicas, mueven tu energía y van configurando tu destino.
¿De qué te sirve tener mucha energía, si la empleas en objetivos que no son tuyos, o no te aportan una satisfacción auténtica?
Además de tus sueños o deseos materiales, tienes que tener metas de crecimiento y superación personal, querer mejorar tus relaciones en general, y de pareja en particular, ser más eficiente con tu tiempo, recursos y energía para gozar más de tu vida. Al aplicar la energía en esas áreas positivas, te retroalimentas, es decir, la energía que gastas, genera nueva energía que vuelve a nutrirte porque haces cosas que te satisfacen y mejoran.
Para canalizar la energía y aplicarla, debes tener una meta donde llevarla. Si no tienes metas, la energía no fluye, no sale y se estanca. Tener una meta, un proyecto, es importante en la vida de una persona para que esté viva, despierta y su energía se mueva.
La meta es importante, como motivación o excusa para moverte, pero el camino que te conduce a la meta, es fundamental. Hacerlo con corazón y gozo, es lo definitivo para disfrutar de tu camino, no perder energía y poder perseverar.
La culminación del trabajo de la energía, es ser consciente de a dónde la llevas, de la motivación y expectativas que hay tras todos tus actos y decisiones porque donde pones tu pensamiento, llevas tu energía.
Técnicas para mover la energía. Amor en acción.
El Tántrico aprende a canalizar la energía para darle más poder de manifestación mediante:
La respiración emocional consciente.
La meditación vital y la visualización.
El movimiento natural consciente. _Ypga emocional-
La invocación y cultivo de emociones positivas.
El ritual sagrado
El sentido de trascendencia
Tomando decisiones. El origen de tus actos. Aplicando la energía. Guia para tomar decisiones positivas y vitales.