
Sexualidad Sagrada y Masaje Tántrico
Masaje Tántrico: Amando y abriendo tu cuerpo. Las llaves del gozo profundo.
Escuchar y sentir el cuerpo, calmar la mente, abrir el corazón y despertar el alma.
Confianza, intimidad y apertura son actitudes necesarias para que el masaje te llegue a lo profundo.
Conciencia, emoción y sensibilidad son actitudes necesarias para quien lo da.
Hay que escuchar y sentir el cuerpo, calmar la mente, abrir el corazón y despertar el alma, para que las caricias lleguen al alma y despiertan las más profundas emociones.
Si esa energía de gozo llega al corazón y despierta la emoción profunda del agradecimiento es una experiencia profundamente sanadora que permite la integración del ser, estimulación la secreción de endorfinas, convirtiéndose en una profunda terapia sanadora, vitalizante para la persona, además de aumentar su vitalidad, optimismo, espíritu positivo y capacidad sensitiva, emocional, erótica y sexual.
El masaje, las caricias profundas, emocionadas, y conscientes, no solo te llenan de una sensación de gozo y bienestar, también estimulan la secreción de endorfinas, permitiendo la sanación física y emocional de la persona.
Reduce el estrés y la tensión muscular, convirtiéndose en una profunda terapia sanadora, vitalizante para la persona, además de aumentar su vitalidad, optimismo, espíritu positivo y capacidad sensitiva, emocional, erótica y sexual.
El masaje tántrico honra al cuerpo como un todo, sin excluir ninguna de sus partes, como un algo sagrado, que no es meramente físico sino también emocional; pero también nos ayudan a sentir la sexualidad y el gozo, como algo que no es meramente genital.
Lo importante no es lo que haces sino cómo lo haces, la emoción que pones en lo que haces.
Lo definitivo no es lo que acaricias sino la emoción que pones en tus caricias.
Las caricias y toques del masaje tántrico, no se quedan en los límites de la piel sino que profundizan más y llegan al alma, al cuerpo emocional.
Solo así el masaje es sanador, liberador, fusionador y te conecta con la divinidad que también eres.
En el tantra todo se hace desde el corazón, buscando la emoción más profunda; no se trata de estar en las formas (las técnicas) aunque también sean importantes, se trata de hacerlo de todo con conciencia, presencia y corazón.
El taller incluye el aprendizaje de diferentes técnicas de masaje, los rituales adecuados pero, sobre todo, el necesario entrenamiento emocional para que pueda darse esa experiencia emocionada y profunda., tanto para el masaje como para la sexualidad tántrica.
Habrá meditaciones, meditaciones vitales, para centrar la mente e inspirar las emociones profundas, que necesita un verdadero masaje tántrico, junto a técnicas de respiración, canalización de la energía y el poder de irradiar y transmitir emociones profundas.
Lo importante no es lo que haces sino cómo lo haces, la emoción que pones en lo que haces.
Lo definitivo no es lo que acaricias sino la emoción que pones en tus caricias.
Las caricias y toques del masaje tántrico, no se quedan en los límites de la piel sino que profundizan más y llegan al alma, al cuerpo emocional.
Un taller sanador, lúdico y profundo que te conecta con el cuerpo, libera tus emociones, te ayuda a profundizar en el gozo y sanarte emocional y sexualmente.
Los problemas que puedas tener en el sexo, son un reflejo de tus problemas existenciales, tus problemas personales y de pareja, también afectan a tu sexualidad. Trabajando tu autoestima y relaciones, mejoras tu sexualidad también.
Hacer tu sexualidad más sagrada y profunda, te ayuda a mejorar los otros aspectos de tu existencia.
Lo que hagas en un nivel repercute en el otro.
La luz del amor es lo que ilumina el mundo y la energía de la sexualidad, es quien pone los colores.