Mucha gente tiene una idea de la meditación como algo poco práctico y más centrado en la espiritualidad o alejarse del mundo que en las necesidades terrenales pero está comprobado científicamente que meditar activa las redes neuronales TPN, las encargadas precisamente de centrarnos y solucionar tareas. Esto hace que dejen de funcionar las Redes Neuronales por Defecto DMN, las que intervienen en la dispersión mental, trastornos de atención y problemas de ansiedad que siempre vienen del miedo.
La Meditación Vital es muy práctica porque además de centrarte en ti, relajarte y darte paz, también te da fuerza vital y desarrolla áreas de tu cerebro que te ayudan a centrarte en ti, tu vida y realidad.
Es una poderosa herramienta de superación personal porque impregna tu subconsciente con imágenes, frases de poder y emociones que te ayudan a grabar nuevos hábitos y patrones de conducta que te ayuda a superarte personalmente, cultivar valores que necesitas y superar problemas.
Una meditación personalizada a cada problema o valor que quieras desarrollar en ti. ¿Cómo funciona?
Es totalmente personalizable a tus necesidades concretas porque construye imágenes y frases de poder adaptadas a lo que pretendas lograr con esa meditación. Hay una fase común a todas las meditaciones, como es el proceso de relajación mental y corporal y entrar en las llamadas ondas alfa del cerebro, estado más receptivo del cerebro para grabar órdenes y sugerencias a tu subconsciente.
Aunque se puede construir una meditación especialmente adaptada a tus necesidades, las hay ya para lograr resultados concretos. Desde simplemente relajarte, liberarte del estrés, mejorar la calidad de tus sueños, conocerte mejor, romper lazos tóxicos, vitalizarte y, la meditación madre de todas, la base para simplemente estar contigo y aprender a enfocar la conciencia en ti en tu cuerpo.
No siempre es necesario estar quieto y con los ojos cerrados, hay meditaciones vitales que se hacen paseando y con los ojos abiertos, una vez que tienes un mínimo de entrenamiento. Como en todo proceso meditativo, necesitas estar presente en ti, en tu respiración, eso en sí mismo, te ayuda a desarrollar tu conciencia, pero la meditación vital añade, una vez logrado el estado de relajación, una tarea, una imagen o sugestión que implantar en tu subconsciente para lograr un fin determinado.
Nuestros cursos de meditación vital, que pueden ser presenciales o a distancia, incluyen estas dos facetas: la pasiva donde estás sentado o tumbado con los ojos cerrados y la dinámica, paseos conscientes por la naturaleza, centrados en tu respiración y canalizar la energía.
Para muchos la experiencia de meditar puede ser aburrida o muy difícil por no poder estar tanto tiempo quietos y creen que se trata de no pensar y tener la mente en blanco; incluso pueden verla como algo demasiado abstracto o teñido de una religiosidad con la que no comulgan. Cierto que muchas veces se presenta con esas formas y algunas quieren alejarte del cuerpo y de la vida pero la Meditación Vital es especialmente poderosa y práctica, además de mucho más amena y fácil de practicar porque es emocional y adaptable a tus condiciones personales.
Beneficios de la Meditación Vital
- Es una meditación llena de ricas imágenes y contenidos emocionales, que no solo te da paz, también nutre tus poderes internos y desarrolla tus dones como ser humano. Aumenta tu vitalidad, autoestima y te entrena para estar plenamente presente en tu realidad cotidiana, con más energía y más preparado, tanto para afrontar sus desafíos como para gozar más de sus gozos porque te libera del miedo que no te deja vivir.
- Es la más fácil de practicar y la que menos tiempo necesita porque su eficacia hace que consigas mejores resultados con menos tiempo.
- Además de las redes neuronales dedicadas a las tareas, también estimula las áreas del cerebro relacionadas con la creatividad y las emociones, por las potentes visualizaciones en las que se basa y su contenido emocional.
- Es vital porque te centra y te compromete con la Vida y con tu Vida, con tus necesidades humanas y las metas de tu ser, centrándote en un aquí y ahora al servicio de tu plenitud personal.
- También nutre los recursos naturales de tu cuerpo y de tu ser para que puedas usarlos en lograr una vida más plena.
- Desarrolla tu inteligencia emocional porque te entrena y fortalece emocionalmente ya que es emocional y consciente, donde evocas y trabajas con determinadas emociones, lo que te entrena en saber gestionarlas.
- Es una meditación sanadora porque además de nutrirte en su fase de inhalación, te limpia, sana y libera en su fase de exhalación; pudiendo irradiar la energía hacia ti mismo u otra persona.
- Es evolutiva y personalizada. Desde las primeras meditaciones básicas y sencillas pero poderosas, ya puedes beneficiarte de sus ventajas para ir avanzando según desarrolles tu capacidad de visualizar.
- Totalmente práctica, no es una meditación que te aleja de la realidad sino que te prepara vivirla desde esa paz y plenitud que da el estar centrado y conectado contigo mismo y los recursos de tu ser. Te ayuda a cambiar la realidad porque te cambia a ti.
- Desarrolla tu conciencia, tu capacidad de estar presente y sin juzgar, sólo sintiendo lo que te pasa, atento a tu cuerpo y tus emociones, a lo que sucede en ti y lo que pasa fuera. ¡Es vivir plenamente! ¡Estar en ti totalmente!
Tu forma de meditar puede adaptarse a tus necesidades personales y además se diseñan meditaciones personalizadas y adaptadas a cada persona. Eso le da una mayor grado de eficacia.
La primera Meditación Vital, la más natural, sencilla y a la vez poderosa, es la Respiración Emocional Consciente porque simplemente estar presente en tu respiración, hacerla profunda, completa, emocionada y consciente, es el primer paso para estar en ti, en tu cuerpo, en tu emoción, en simplemente tu respirar. Algo básico, natural, sencillo y poderoso que te entrena y prepara para el resto de las meditaciones y además te limpia, te libera, te nutre y te da mucha energía. Tan potente como equilibrada y completa, además de vitalizarte, te serena, y fortalece emocionalmente.