Sanando tu Cuerpo y tu Alma, encauzar y liberar al Castigador o Saboteador Interno

No puedes verlo como un enemigo ni desear su destrucción porque entonces se hará más fuerte en ti, además de que es una parte tuya aunque tú eres más que esa voz.

Es un ser necesitado de amor que sea alimenta de culpa y desamor, por lo tanto lo primero es aceptarlo. La meta no es que desaparezca sino integrarlo positivamente en ti, redimirlo y encauzar esa energía para que sea útil y no hostil a tus  verdaderos intereses.

Naturalmente que hay boicoteadores mucho más hostiles que otros, como hay heridas más graves que otras, aunque el proceso de sanación e integración es el mismo, en algunos casos se precisa ayuda o terapia.

Mientras no esté encauzado, de alguna manera, una parte de tu vida y tus actos está prisionera o limitada por su energía pero también debes darte cuenta que el personaje está a su vez prisionero de la culpa o herida de donde surgió.

Comprende ahora la naturaleza del proceso, para poder liberarte tú, tiene que ser él liberado antes. Todo el proceso de sanación es un acto de amor y perdón hacía tí mismo pero especialmente hacia la persona.

8 Pasos para dejar de Castigarte

1.- Reconocimiento. Darse cuenta de su existencia.

2.- Acepción de su realidad. No rechazarlo.

3.- Descubrimiento. Comprensión del diálogo interno –sus razones para boicotearte- Cómo actúa.

4.- Sentimiento. Reconocer el daño y sentirlo, darse cuenta de su importancia pero sin juzgar ni culpar, simplemente omar conciencia de lo que pierdes o pasa. No basta decirse intelectualmente me hace esto, hay que sentir el daño, lo que sucede, darle la importancia que tiene.

5.- Redención y perdón. Una vez reconocido y sentido el daño hay que perdonarse y perdonar. Redimir al personaje y a ti mismo. Comprendes por qué actua así, siempre es por no haberse sentido querido. Ves y le haces ver lo que daña su actitud y después perdonas, te perdonas y le perdonas para volver a empezar.

6.- La visión es ver cómo sería la vida y la realidad si no existiese ese boicot y el sabotedor estuviese encauzado y redimido. Hay que recrearse en lograr lo que no ha podido conseguirse y evitar los daños que suceden. Hay que visualizar, sentir y emocionarse con todo lo positiva que podría ser la vida así. Esta visualización debe hacerse todos los días en medio de alguna meditación, para ayudar en el proceso de cambio.

7.- La siembra.– El boicoteador no solo destruye o impide que sucedan cosas, también bloquea que se expresen en ti determinadas cualidades o valores. La siembra es visualizar y fomentar esas cualidades y dones no expresados y que compensan o son contrarios a lo negativo que sucede.

8.- La estrategia es planificar acciones necesarias para encauzar al boicoteador. Sabes el por qué actúa así y sus razones, preparas las tuyas, un nuevo dialogo interior con él para encauzarlo hacia tus nuevos propósitos y objetivos.  Es prepararte porque sabes que está ahí y que surgirá en determinadas circunstancias, sabes lo que va a susurrarte dentro de la mente y estás preparado para ello con una estrategia adecuada que incluye fomentar en ti determinados dones y cualidades, además de visualizar y tener muy claro qué quieres ahora en tu vida y qué le vas a decir.

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